Jujuy es uno de esos lugares que te roban el corazón desde el primer momento. Con paisajes que parecen de otro planeta, pueblos llenos de historia y una energía especial que se siente en el aire, esta provincia del norte argentino es un destino imperdible. Desde las Salinas Grandes hasta el Cerro de los 7 Colores, cada rincón te sorprende con colores, aromas y sonidos únicos.
Llegar es muy fácil: la terminal de micros de San Salvador de Jujuy recibe servicios diarios desde Buenos Aires, Salta, Tucumán y otras provincias. Desde allí podés recorrer toda la provincia en pocas horas, ya que las distancias son cortas y los paisajes, inolvidables.
Si estás planeando tu próxima escapada, seguí leyendo y descubrí 20 cosas para hacer en Jujuy, una guía con los imperdibles, experiencias naturales y culturales que hacen de esta provincia un pedacito mágico del norte argentino.
¿Qué hacer en Jujuy?
1. Salinas Grandes: un mar blanco en las alturas
Las Salinas Grandes de Jujuy son uno de los paisajes más impactantes del país. Ubicadas a más de 3.400 metros sobre el nivel del mar, este desierto de sal se extiende entre Jujuy y Salta, formando un espejo blanco infinito que brilla bajo el sol.
El contraste entre el blanco del suelo, el azul del cielo y los cerros de fondo es impresionante. Es ideal para sacar fotos únicas, especialmente al amanecer o al atardecer, cuando los colores cambian minuto a minuto.
Tip viajero: no olvides llevar lentes de sol y protector solar; la radiación en altura es fuerte y el reflejo del blanco puede encandilar.
2. Cerro de los 7 Colores: la postal de Purmamarca
El Cerro de los 7 Colores, en Purmamarca, es una de las postales más famosas de Jujuy y de todo el norte argentino. Sus tonalidades rosadas, verdes, violetas y ocres parecen pintadas a mano por la naturaleza.
Podés recorrer el Paseo de los Colorados, un sendero corto que rodea el cerro y permite disfrutarlo desde distintos ángulos. En el pueblo, las calles empedradas, el mercado artesanal y las casitas de adobe completan el encanto.
Tip viajero: subí al mirador del pueblo temprano por la mañana para ver cómo el sol ilumina los colores uno por uno.
3. Hornocal: el cerro de los 14 colores
La Serranía del Hornocal, o simplemente El Hornocal, es otro espectáculo natural de colores. Está cerca de Humahuaca y alcanza los 4.300 metros de altura. Desde el mirador, se aprecian las formaciones multicolores que se extienden como un abanico.
El paisaje es tan impresionante que muchos lo llaman “el hermano mayor del Cerro de los 7 Colores”. Llegar requiere subir en vehículo por un camino de ripio, pero las vistas son inolvidables.
Tip viajero: llevá abrigo y agua; la altura se siente y el viento puede ser fuerte, incluso en verano.
4. Termas de Reyes: descanso entre montañas
Las Termas de Reyes, ubicadas a unos 20 km de San Salvador de Jujuy, son un oasis de relax en medio de los cerros. Sus aguas termales, ricas en minerales, son ideales para aliviar el estrés y cuidar la piel.
El complejo ofrece piletas naturales, hospedaje y restaurante, todo rodeado de paisajes verdes y aire puro. Es una parada ideal después de recorrer la Quebrada de Humahuaca.
Tip viajero: si vas en temporada alta, conviene llegar temprano para aprovechar las termas con tranquilidad.
5. Parque Nacional Calilegua: selva en el norte
El Parque Nacional Calilegua es uno de los secretos mejor guardados de Jujuy. A diferencia del paisaje árido de la quebrada, aquí domina la selva de yungas: árboles gigantes, lianas, tucanes y monos caí.
Se puede recorrer en auto o caminando por senderos señalizados. El camino serpentea entre cerros y valles, ofreciendo miradores espectaculares.
Tip viajero: llevá repelente, agua y cámara de fotos. Es un paseo perfecto para quienes disfrutan del contacto directo con la naturaleza.
6. Quebrada de Humahuaca: historia y cultura viva
Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, la Quebrada de Humahuaca recorre más de 150 km de paisajes, pueblos coloniales y sitios arqueológicos.
Cada localidad tiene su encanto: Purmamarca, Tilcara, Humahuaca y Uquía son paradas imperdibles. Además, en febrero se vive uno de los carnavales más alegres del país, donde se mezclan rituales andinos y fiesta popular.
Tip viajero: recorré la quebrada en micro o auto, haciendo paradas cortas en cada pueblo para disfrutar de su ritmo y sabores.
7. Cuesta de Lipán: camino panorámico hacia las salinas
La Cuesta de Lipán une Purmamarca con las Salinas Grandes y es uno de los caminos más espectaculares de Argentina. Las curvas se elevan hasta más de 4.000 metros, ofreciendo vistas panorámicas de montañas y valles.
Durante el recorrido podés detenerte en miradores naturales para sacar fotos y observar vicuñas. Es una experiencia en sí misma, más allá del destino final.
Tip viajero: ascendé despacio y llevá caramelos o hojas de coca para aliviar el mal de altura.
8. Pucará de Tilcara: ruinas y legado ancestral
El Pucará de Tilcara es una antigua fortaleza construida por los pueblos originarios hace más de 900 años. Desde su mirador se obtiene una vista imponente del valle y los cerros.
El sitio arqueológico está muy bien conservado y cuenta con un museo que explica cómo vivían las comunidades precolombinas.
Tip viajero: visitá temprano para evitar el calor del mediodía y aprovechar la luz ideal para fotos.
9. Quebrada de las Señoritas: un paisaje encantado
En el pequeño pueblo de Uquía se encuentra la Quebrada de las Señoritas, un sitio lleno de formaciones rocosas rojas y leyendas. Se puede recorrer caminando entre senderos que atraviesan gargantas, cerros y pasajes naturales.
El contraste de colores es increíble, y el silencio del lugar lo vuelve mágico.
Tip viajero: llevá zapatillas cómodas y agua. El recorrido es corto, pero el terreno es irregular.
10. Termas del Jordán: un paraíso escondido
Las Termas de Jordán (o del Río Jordán) son un tesoro oculto cerca de San Francisco, en las Yungas jujeñas. Para llegar, se necesita una caminata o cabalgata de unas 3 horas entre selva y ríos, pero el esfuerzo vale la pena.
El lugar está formado por pozas naturales de agua verde esmeralda, templadas y rodeadas de vegetación.
Tip viajero: andá con guía local y buen calzado. Es una excursión de aventura, ideal para quienes buscan desconectarse de todo.
11. Yungas de Jujuy: selva y biodiversidad
Las Yungas jujeñas son un pulmón verde que sorprende con su vegetación exuberante. Albergan especies únicas de flora y fauna, y son ideales para caminatas, observación de aves y fotografía.
Desde Libertador General San Martín se pueden hacer excursiones o visitas guiadas para conocer este ecosistema en profundidad. El aire húmedo, el canto de los tucanes y el aroma del bosque crean una experiencia sensorial única.
Los senderos del Parque Calilegua o la zona de San Francisco son excelentes puntos de partida para adentrarse en esta selva de montaña. Cada curva del camino revela un paisaje nuevo, lleno de vida.
Tip viajero: llevá repelente, agua y cámara de fotos. Es un paseo perfecto para quienes disfrutan del contacto directo con la naturaleza.
12. Inca Cueva: arte rupestre milenario
La Inca Cueva, ubicada cerca de Humahuaca, es un sitio arqueológico con pinturas rupestres de más de 10 000 años. Las figuras representan animales, escenas de caza y símbolos andinos que testimonian la vida de los primeros habitantes de la región.
El recorrido incluye una caminata corta entre cerros, con paisajes áridos y misteriosos que parecen detenidos en el tiempo. El silencio del lugar refuerza su carácter sagrado y lo convierte en una experiencia casi espiritual.
Es un sitio ideal para quienes disfrutan de la historia y la arqueología, ya que combina naturaleza y pasado ancestral.
Tip viajero: es recomendable ir con guía para interpretar las pinturas y proteger el sitio.
13. Paso de Jama: aventura hacia el altiplano
El Paso de Jama conecta Argentina con Chile y atraviesa paisajes de otro mundo: salares, lagunas altoandinas y montañas coloradas. Aunque muchos lo usan como cruce fronterizo, es en sí mismo un atractivo imperdible.
A lo largo del recorrido, se pueden ver vicuñas, flamencos y guanacos en su hábitat natural. Las vistas son impresionantes, y cada curva del camino ofrece una nueva postal de la puna jujeña.
El aire puro, el silencio y los colores intensos del paisaje hacen que el viaje sea inolvidable. Ideal para quienes buscan rutas escénicas y fotografía.
Tip viajero: llevá abrigo, protector solar y mucha agua; el clima en altura cambia rápidamente.
14. Parque de las Yungas y Reserva de Yala
A solo 20 km de San Salvador, la Reserva de Yala ofrece lagunas, bosques y senderos entre montañas. Es el acceso más fácil a las yungas sin alejarse mucho de la ciudad.
Podés hacer picnic, avistaje de aves o simplemente disfrutar de la tranquilidad del entorno. Las lagunas de Yala, rodeadas de árboles, son perfectas para descansar o sacar fotos de reflejos perfectos.
También hay campings, hosterías y pequeños restaurantes rurales donde se puede probar comida casera regional. Es una escapada perfecta para un día de relax.
Tip viajero: si te gusta acampar, hay áreas habilitadas junto a los lagos.
15. Termas de Reyes Jujuy: descanso asegurado
Otra opción para relajarse son las Termas de Reyes, con aguas minerales que brotan a más de 50 °C. En el complejo hay spa, alojamiento y pileta panorámica con vista a los cerros.
El entorno verde y el sonido del río hacen que el descanso sea total. Las aguas termales, conocidas por sus propiedades terapéuticas, atraen tanto a locales como a turistas.
Además, se pueden hacer caminatas suaves por los alrededores y observar la flora típica de la zona. Es el plan perfecto para quienes buscan desconectarse del estrés urbano.
16. Valle de la Luna Jujuy: formaciones fuera de este mundo
Cerca de Cusi Cusi, el Valle de la Luna jujeño sorprende con sus formas caprichosas y tonos rojizos, grises y blancos. Es un paisaje que parece sacado de otro planeta, moldeado por siglos de erosión.
Al recorrerlo, se tiene la sensación de estar caminando por un escenario lunar. Es un sitio ideal para los amantes de la fotografía, la geología o quienes buscan experiencias diferentes.
No hay servicios cerca, por lo que conviene ir preparado con agua, comida y calzado adecuado. La paz y la inmensidad del lugar hacen que el silencio sea parte del atractivo.
Tip viajero: consultá el estado del camino antes de ir, ya que es de ripio y no siempre transitable.
17. Laguna Esmeralda Jujuy: calma y color
En la zona de Yavi Chico se encuentra la Laguna Esmeralda, un espejo de agua verde intenso rodeado de cerros. Su color varía según la luz del día, y es un rincón poco conocido pero increíble.
El sitio invita al descanso, al mate y a la contemplación. Es ideal para quienes buscan paz, lejos del turismo masivo. La pureza del aire y el reflejo del cielo en el agua generan una postal perfecta.
También es un excelente punto para observar aves altoandinas y disfrutar de un entorno casi intacto.
Tip viajero: llevá abrigo y algo para comer; no hay servicios en la zona.
18. Paseo por San Salvador: cultura y compras
La capital jujeña tiene su propio encanto: museos, plazas, bares y el moderno Annuar Shopping, con opciones de cine, gastronomía y locales de diseño.
Es ideal para una tarde de descanso entre excursiones. El centro histórico combina arquitectura colonial, arte urbano y movimiento local. Además, el Cine Annuar es una opción perfecta para cerrar el día con una película o café.
En los alrededores podés visitar la Catedral de San Salvador, el Museo Lavalle o caminar por la peatonal Belgrano. Todo está a pocas cuadras, en un ambiente tranquilo y seguro.
Tip viajero: aprovechá para visitar la Casa de Gobierno, otra joya arquitectónica del centro.
19. Paleta del Pintor: arte natural en Maimará
En el pequeño pueblo de Maimará, la Paleta del Pintor es un cerro multicolor que parece pintado a pincel. Los tonos se intensifican con el sol y cambian durante el día, creando un espectáculo natural que deja sin palabras.
Desde el mirador del cementerio o el Puente Natural, se obtienen las mejores vistas de esta formación. El contraste entre las montañas y el verde del valle forma una de las postales más bellas de la quebrada.
El pueblo, además, conserva un ambiente tranquilo, con calles de tierra y casas antiguas que reflejan la vida del interior jujeño.
Tip viajero: el amanecer y el atardecer son los momentos más fotogénicos.
20. Qué hacer en Jujuy en 3 días
Día 1
Cerro de los 7 Colores
Paseo de los Colorados
Pucará de Tilcara
Día 2
Salinas Grandes
Cuesta de Lipán
Hornocal
Día 3
Termas de Reyes
Parque Calilegua
Quebrada de las Señoritas
¿Cómo llegar a San Salvador de Jujuy? Ubicación y dónde queda en el mapa
Podés llegar a San Salvador de Jujuy de varias formas, según tu punto de partida y preferencia:
🚗 Andá en auto
Ciudad de partida: Buenos Aires
Ruta: Ruta Nacional 9 directa hasta Jujuy, vía Córdoba y Tucumán
Tiempo estimado: Entre 18 y 20 horas
Condiciones de la ruta:
Autopista y ruta bien mantenida en la mayor parte del recorrido
Peajes: $2.500 (actualizado abril 2025)
🚌 Viajá en micro
Para viajar cómodo y seguro, podés sacar tu pasaje a San Salvador de Jujuy en micro y disfrutar del paisaje durante el recorrido.
Terminal de partida: Terminal de Ómnibus de Retiro (Buenos Aires)
Empresas: La Veloz del Norte, Balut
Duración estimada: Entre 22 y 24 horas
Terminal de llegada: Terminal de Ómnibus de San Salvador de Jujuy
🚆 Aprovechá el tren
Actualmente no hay tren directo a Jujuy desde Buenos Aires.
✈️ Llegá en avión
Aeropuerto de partida: Aeroparque Jorge Newbery (Buenos Aires)
Aeropuerto de llegada: Aeropuerto Internacional Gobernador Horacio Guzmán (JUJ)
Duración del vuelo: Aproximadamente 2 horas
Aerolíneas que operan:
Aerolíneas Argentinas
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Reviews de San Salvador de Jujuy
¡Viajá a Jujuy!
San Salvador de Jujuy se encuentra en una ubicación bastante central dentro de la provincia de Jujuy, lo que la sitúa relativamente cerca de varios de los puntos turísticos más famosos de la región. De esta manera, podrás visitar en micro o auto: Purmamarca (aprox, 65 km), Tilcara (84 km), Humahuaca (126 km), Salinas Grandes (125 km por la Ruta Nacional 52), Laguna de Pozuelos (230 km), entre otros.
